Durante casi la mitad de las décadas de carrera de Britney Spears como estrella del pop de renombre mundial, la cantante de «Womanizer» y “Toxic” no ha tenido el control total de su vida.
Britney ha estado bajo la tutela de su padre, Jamie Spears, desde el infame colapso que la cantante tuvo en 2007 y que terminó en hospitalizaciones y rehabilitación. Aunque el estigma que rodea a las batallas de salud mental de Spears ha seguido a la cantante desde ese año, su carrera nunca vaciló.
El ejemplo más claro es de ello es cuando marcó su rotundo y exitoso regreso oficial con su álbum de 2008, Circus. Britney continuó lanzando álbumes, girando, protagonizando una residencia de un año en Las Vegas y lanzando empresas comerciales que incluyen sus lucrativas líneas de perfumes y lencería homónima.
Sin embargo, a pesar de las múltiples reapariciones, los fanáticos de Britney desde hace mucho tiempo han expresado su insatisfacción al ver que la estrella del pop continúa bajo tutela a los 39 años. Totalmente convencidos de que la cantante también quiere estar libre de la vinculación legal, los fanáticos lanzaron el movimiento #FreeBritney, utilizando las redes sociales para crear conciencia sobre las discrepancias que rodean dicha tutela.
¿Qué es una curatela?
Una tutela, según el sitio web oficial de los Tribunales de California, es cuando un juez designa a una persona u organización para que cuide de otro adulto que se considera no apto para cuidar de sí mismo o para administrar sus propias finanzas. Para el caso de Britney, Britney es considerada la «pupila» y su padre, Jamie, el «conservador».
Durante los últimos 12 años, los detalles de la tutela de Britney han sido privados, pero la cantante recientemente presentó documentos a través de su abogado que solicitan que partes de su tutela estén abiertas al público.
¿Por qué se estableció la tutela de Britney?
Britney fue puesta bajo tutela luego de su colapso público en 2007. Después de un año de comportamiento aparentemente errático, como afeitarse la cabeza y atacar el auto de un paparazzi con un paraguas, la cantante fue sometida a una «retención» en un hospital psiquiátrico por una evaluación de salud mental.
En ese momento, Jamie solicitó a los tribunales una tutela «temporal» de emergencia, aludiendo al hecho de que su hija no podía cuidarse y manejarse adecuadamente en medio de sus problemas de salud mental.
A partir de ahí, a Jamie se le otorgó el derecho legal de supervisar y tomar decisiones con respecto a las finanzas, la salud, los negocios y la vida personal de Britney, algo que dirigió hasta 2019.
¿Por qué los fans están preocupados por el bienestar de Britney?
Los fanáticos de Britney han desconfiado durante mucho tiempo de los términos de la tutela y a menudo se han preguntado si era lo mejor para Britney. Recientemente, el movimiento #FreeBritney resurgió debido a un episodio del podcast Gram de Britney, durante el cual un abogado anónimo, que anteriormente formaba parte de la firma que supervisa la tutela de Britney, expresó su preocupación por Britney y su padre dirigiendo la vida de la estrella del pop.
«Durante los doce años de tutela de Spears, ella ha realizado giras por el mundo en repetidas ocasiones, ha publicado varios álbumes y ha trabajado en una variedad de programas de televisión», señaló el sitio. «Sus curadores deciden si trabaja o no, ya que no puede celebrar contratos por sí misma porque legalmente no es su propia persona. Britney Spears necesita permiso de sus curadores para salir de su casa o gastar parte de su propio dinero». Los fanáticos también han salido a las calles y han protestado en nombre de Britney, exigiendo el fin de su tutela. El movimiento #FreeBritney llegó a imponerse tanto que en la actualidad ya hay ciertos avances a favor de la cantante, pues ahora ya tiene la plena libertad de contar con un abogado elegido por ella misma.